SANTO DOMINGO.-Exministros de Educación tienen opiniones tanto a favor como en contra de que se descontinúen las Pruebas Nacionales establecidas en sistema educativo dominicano en 1992, las cuales han sido calificadas como una “retranca” por la ADP y en otros casos innecesarias por dirigentes magisteriales porque las deficiencias encontradas en los estudiantes no se pueden corregirse al finalizar el nivel secundario.
“Bajo ninguna circunstancia estoy de acuerdo con que se elimine ese mecanismo ni las Pruebas Diagnósticas dentro de los niveles. Lo que sí creo que se debe evaluar es cómo hacer más efectivas las medidas de la pruebas”, comentó Andrés Navarro, titular del Minerd, durante el periodo 2016-2019.
Navarro, quien fuera ministro en la gestión del Partido de la Liberación Dominicana, alega que las Diagnósticas son herramientas científicas para establecer estrategias de mejoras y las Nacionales al final, que son las de acreditación, que además de servir de diagnóstico para saber el producto que se está enviando a las universidades, también pone un nivel de aprendizaje básico que está listo para ir al nivel superior.
“De lo contrario, lo que estaríamos es enviando a decenas, cientos de miles de estudiantes al nivel universitarios sin tener la más mínima idea del grado de aprendizaje que se ha logrado, entonces se estaría transfiriendo una problemática que de por sí ya existe en determinados grados y aumentándola para las universidades”, externó.
Sin buenos resultados
Al igual que él , Ligia Amada Melo, exministra del 1996 al 2000 del PLD, le inquieta que los resultados no son buenos, pero a su entender no quiere decir que haya que eliminarla.
“En todo proceso educativo, la evaluación es imprescindible y las Pruebas Nacionales al evaluar al final de todo el sistema es necesario que se hagan porque arrojan los resultados del sistema completo.
Recomiendo mejorar los aprendizajes”, puntualizó Melo . Contrario a esa posición, Melanio Paredes, ministro quien ocupó el cargo de 2008 a 2011, favorece que las Pruebas Nacionales sean eliminadas, tomando en cuenta que la forma en que se están llevando a cabo: “Derivan en un placebo”, es decir, que no sirven para comprobar o mejorar sus resultados.
“Los esfuerzos de nosotros han sido inútiles, seguimos con muy bajo nivel de aprendizaje, hay tres factores para mi fundamentales: la falta de continuidad de las políticas educativas, se cambian permanentemente y eso causa incredibilidad en los maestros, no hay apego a las buenas prácticas; además, hay una resistencia al cambio en la sociedad”, dijo.