Si viaja a la región sur de la República Dominicana, tenga en cuenta que esta es la que menos cajeros automáticos tiene disponibles para los clientes del sistema financiero nacional: apenas el 7.58 % del total reportado por la Superintendencia de Bancos.
El último corte estadístico de la Superintendencia indica que, a diciembre del año pasado, había dos cajeros automáticos en la provincia Pedernales e igual cantidad en Independencia, los dos destinos del país con menos de estos dispensadores de dinero en efectivo y de otras transacciones.
Además de Pedernales e Independencia, la región sur de la República Dominicana la componen las provincias Azua, Bahoruco, Barahona, Elías Piña, Peravia, San Cristóbal, San José de Ocoa y San Juan. La Oficina Nacional de Estadísticas proyecta que para este 2022, residen en la región 1,793,085 personas, el 17 % de la población total estimada del país.
Entre Elías Piña (63,196 habitantes), Independencia (59,472) y Pedernales (35,557), la segunda es la más dinámica a nivel económico por albergar un paso fronterizo formal en Jimaní. Las otras dos son de las provincias más pobres del país.
El Gobierno tiene un ambicioso plan de desarrollo turístico en Cabo Rojo, Pedernales, que bien podría revolucionar la economía de ese territorio.
Mientras, una persona que solicite acceso al crédito en una provincia fronteriza para actividades productivas tendrá que pagar una tasa de interés por encima del promedio, en las entidades de intermediación financieras por el nivel de riesgo de los clientes y el costo operacional.
El Ministerio de Economía lo destaca en su informe de marzo pasado “Monitor de la frontera”. La Asociación de Bancos de la República Dominicana lo atribuye a que, en general, las provincias en la zona fronteriza se caracterizan por el desarrollo de actividades de producción como la agricultura, ganadería, pesca, pequeñas empresas y microempresas, cuyo nivel de riesgo es mayor “debido a cierta inestabilidad financiera de los clientes por condiciones de la oferta y demanda de productos, las condiciones climáticas y otros factores”.
Además que, por lo regular, “el tipo de entidades de intermediación financiera que operan en estas localidades tienden a tener costos más elevados que en las zonas metropolitanas, lo que se transmite hacia las tasas de interés de los financiamientos”.
La zona acumula rezagos importantes en términos de inclusión financiera, agrega el Ministerio. Indica que el acceso a financiamiento es menor por una baja presencia del sistema financiero consolidado por habitante.
El Banco Central también cuenta una cantidad de cajeros automáticos de empresas administradoras de cajeros automáticos, pero que no son entidades financieras regulares. A febrero pasado, la institución rectora contabilizaba un universo de 3,425, estando el 7.24 % en la zona sur.